"Historias con aromas de barrio, viajes y fantasía"

"El presidente del club Flecha de Oro, Miguel Naso, recordaba: 'Villa Insuperable era hermosa, era linda, salir a la calle... había un campito en cada lugar, jugaba al agua en el carnaval... el corso de Crovara nacía en la calle Pintos, hasta San Martin y bueno, el carro del lechero ya una semana antes estaba disfrazado con guirnaldas'". - Carnavales en el Club Villa Insuperable, 1953, familia Bisio.
Los Corsos y los Carnavales

Durante el peronismo la cultura popular ganó gran auge. Desde el estado se incentivaba la identidad obrera, y lo popular empezó a sentirse como signo de identificación y orgullo en una clase social antes relegada. En ese contexto se intensificó una práctica festiva local: se fueron organizando a partir del encuentro e intercambio vecinal en los barrios, los distintos carnavales. Las murgas representaban a los centros sociales de cada barrio, y los carnavales fueron mantenidos como fiesta pública por entidades que se organizaron en función de lazos de vecindad y territorio, que es la forma que todavía se encuentra en nuestros días. Durante el primer peronismo, como en toda fiesta popular, el Carnaval conquistó el aire de arrabal venido a menos en periodos anteriores. - Rodríguez Marta, “Historias con aromas de barrio, viajes y fantasía”, Soria Editor, Lomas del Mirador, 2011


Extracto de "Historia de Villa Insuperable"

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